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Son linternas ligeras y fáciles de transportar ya que ocupan poco espacio. Dentro de este grupo entrarían las linternas con cuerpo de policarbonato, muy ligeras ya que este material pesa la mitad que el aluminio y es extremadamente resistente. También estarían incluidas las linternas llavero, y las linternas que dejan las manos libres, como las linternas frontales y las linternas para bicicletas.
Este tipo de linternas son necesarias cuando necesitamos más luz de las que ofrecen las linternas menos pesadas. Generalmente necesitaremos una mochila o un bolso para transportarla, por lo que tendremos que tener en cuenta la dureza de nuestra actividad. Algunas también se pueden fijar al cinturón.
La energía de las baterías depende de dos factores, El voltaje es la fuerza y el amperaje es la intensidad con la que fluye la energía. A mayor voltaje, la luz brilla más, es más luminosa. A mayor amperaje más tiempo durará la linterna encendida.
La ventaja de las pilas alcalinas es que se pueden encontrar en cualquier sitio a un precio muy asequible. Recomendadas para linternas pequeñas y poco potentes. La gran desventaja es que no tienen la suficiente potencia para alimentar correctamente una linterna led más potente, no serán capaces de alimentar toda la potencia que pueden ofrecer los led.
Depende del tamaño y la potencia de la linterna, hay distintos tipos de pilas:
AAA, las pilas más finas, para linternas pequeñas que ofrecen una potencia lumínica entre 60-180 lumens.
AA, son un poquito más grandes, ofrecen una potencia lumínica entre 100 y 290 lumens.
C-D, son las pilas más grandes, ofrecen una potencia lumínica entre 120 y 500 lumens, son poco manejables y muy pesadas, por lo que no son muy recomendables.
La principal característica de este tipo de baterías, es que, a pesar de tener prácticamente el mismo voltaje que las pilas alcalinas, ofrecen mucho más amperaje, por lo que la linterna ganará en autonomía. Este tipo de baterías pueden estar varios años sin usarse y aun así guardar el 80% de su carga.
Son las más comunes, ya que se pueden adquirir en cualquier establecimiento. Su ventaja sobre las alcalinas es que ofrecen mucho más amperaje, por lo que son capaces de alimentar leds más potentes. Estas pilas tienen un problema, y es que si después de cargadas no se usan se autodescargan. Hay algunas baterías NiMH que vienen con una tecnología LSD (low self discharge) que evitan precisamente este problema.
Son pilas de iones de litio. Tienen mucho mayor voltaje que el resto de baterías por lo que son el sistema de alimentación apropiado para las linternas más potentes. Es un tecnología difícil de manipular si no sabemos lo que hacemos. Hay baterías protegidas que incluyen un circuito que está continuamente manipulando la carga y descarga para evitar problemas y accidentes. Las baterías no protegidas no son muy recomendadas si no somos expertos en manipularlas.
Las linternas tienen o espejo o reflector que es lo que va determinar la anchura, la distancia y la calidad del haz de luz. Cuanto más ancho sea el reflector, a más distancia llega la luz. Cuanto menos diámetro tenga, menos alcance tendrá la luz, pero más alumbrará a nuestro alrededor.
Los reflectores juegan un papel muy importante para determinar ante qué tipo de linterna nos encontramos:
Según el tipo de reflector hay dos tipos de linternas:
Alcanzar a iluminar una gran distancia, pero centran el haz de luz en un punto muy concreto, y no vemos prácticamente nada alrededor de ese punto. Son poco útiles salvo para alguna actividad concreta como la caza.
Iluminan una distancia más corta pero el círculo de luz es más amplio a nuestro alrededor.
Es el material más común. Es un material muy durable, resistente a los golpes y rayaduras, pero es un material pesado. Se enfría y se calienta con cambios extremos de temperatura. Este tipo de aluminio es antimagnético, por lo que la influencia de los imanes no le afecta.
El policarbonato es un material muy ligero, pesa la mitad que el aluminio y es prácticamente irrompible. Soporta temperatura de hasta -175 grados y +175 grados sin sufrir ningún daño. No transmiten el frío ni el calor a las manos, por lo que además de linternas robustas son agradables al tacto.
Material que se usa en las gamas más altas, muy robusto pero transmite el calor y el frío más que los anteriores materiales. Conlleva un alto coste, por lo que es un material poco utilizado.
Las linternas pueden tener hasta siete modos de funcionamiento que nos permiten ajustar la cantidad de luz según lo que necesitemos y lo que queremos que duren las batería
Lo normal es tener un modo alto, medio y bajo (HIGH, MED y LOW). Las linternas tácticas y profesionales tienen además un modo estroboscópico (Strobe), que es cuando la linterna realiza muchos destellos seguidos como si fuera un flash. Además pueden tener un modo SOS que nos da la señal SOS en código morse internacional, y un led alternativo de color rojo para iluminación nocturna.
Disponen únicamente de un botón de encendido y apagado y no te permiten controlar ni la cantidad de luz ni el modo.
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